Desde principios de 2015, el Ayuntamiento de Villanueva del Duque viene colaborando con el sector de la apicultura apoyando y cofinanciando un curso que, bajo la rúbrica “20 Kilogramos por colmenas”, ha prestado asesoramiento y asistencia técnica a apicultores profesionales y a aficionados del sector durante más de un año. Los orígenes de esta iniciativa se remontan a un curso de formación que se impartió en el municipio en el año 2011 con la intención de impulsar el sector apícola en la comarca de Los Pedroches.
Según el técnico y veterinario que ha impartido el curso, José Antonio Ruiz Martínez, el Ayuntamiento de Villanueva del Duque contemplaba ya la necesidad de “aplicar mejoras en la zona, procurando a los profesionales no sólo formación, sino también asistencia técnica”. Fue así como a principios de 2015, el consistorio de la localidad apoyó este curso que, aunque finalizará el próximo domingo, ha impulsado la constitución de la primera asociación que unifica y representa a los apicultores de la comarca.
Desde que el pasado 5 de mayo se constituyera de forma oficial la Asociación de Apicultores de la Comarca de Los Pedroches, a parte de contar ya con más de 50 socios, han sido numerosas las actividades y esfuerzos que este colectivo ha ido desarrollando con el propósito de “dar a la apicultura vallesana el lugar que se merece”. Así, mañana a las 9:00 horas, el grupo celebrará unas jornadas de puertas abiertas en el Salón de Usos Múltiples de Villanueva del Duque (Plaza de Santa Bárbara) para clausurar el curso que ha supuesto la punta del iceberg para los nuevos proyectos trazados.
Por su parte, el presidente de la Asociación, Miguel Ranchal, valora el curso de “forma muy positiva” y asegura que constituirse como asociación ha servido para “aunar fuerzas y tomar conciencia de la necesidad de defender el papel tan importante que tiene la apicultura en la Comarca de Los Pedroches”. Gracias a este tipo de iniciativas, según Ranchal, “ha desaparecido el egoísmo de no estar en contacto con los demás apicultores” y les ha servido para “trabajar codo con codo en todas y cada una de las colmenas”.
En la misma línea, Ruiz incide en la importancia de que todos los profesionales del sector permanezcan unidos porque “los apicultores son ganaderos y tienen su importancia”. Asimismo, alerta de que “la apicultura es una ganadería cuyo producto se recoge directamente de la naturaleza y el medio ambiente hoy en día está muy deteriorado”. Aún así, se muestra bastante esperanzado porque considera que, puesto que la apicultura es un sector que no necesita una inversión muy grande, “se pueden seguir haciendo muchísimas más cosas”.
La finalidad de la Asociación de Apicultores es presentar a corto, medio y largo plazo, proyectos contundentes que lleven a instituciones, sindicatos y empresas ya consolidadas a “ver la rentabilidad de comercializar la miel de calidad que se produce en la Comarca”. Para ello, según Ranchal, será necesario a largo plazo “crear una cooperativa propia que cuente con un edificio y una envasadora; idear una marca y lograr, finalmente, una Denominación de Origen”.
Por su parte, Ruiz matiza que “es necesario dar un giro de 180 grados a la estrategia de marketing”. Lamenta que actualmente se está produciendo “una verdadera burbuja inmobiliaria sin los necesarios estudios de potencial apícola y carga ganadera, para las distintas regiones o comarcas”. Así, para entender cuáles son las premisas de una asistencia técnica adecuada, según sus indicaciones, “es necesario comprender y ordenar los factores productivos, la valorización y la comercialización del producto”.
Por el momento, la corporación quiere seguir apoyando “las iniciativas de los apicultores”; procurando “ayuda directa entre los socios”; sirviendo de canal para “divulgar los proyectos, las actividades y el conocimiento”; y, sobre todo, “defendiendo y promocionando al apicultor protegiendo en todo momento el respeto a la abeja y al medio ambiente”.
De Lucía Suárez para villanuevadelduque.com