A las seis de la tarde de ayer, la plaza del Duque de Béjar se comenzaba a llenar de colorido, música y diversión. El Carnaval 2018 daba comienzo. Moteros, emoticonos, paracaidistas y un mundo salido directamente de Alicia en el País de las Maravillas, entre otros originales disfraces, acudían a la cita para dar inicio al pasacalle que, amenizado por la charanga villaduqueña “El Bombazo”, ponía broche de oro al pistoletazo de salida del particular Carnaval villaduqueño…
Un encuentro variopinto en la plaza del Duque de Béjar, en los que los ruidos de los motores, los gestos de varios emoticonos, los sabores de varias pizzas y el estrés de los repartidores…. Un dragón espontáneo y un pollito que carece de la necesidad de preguntar ¿Qué ha pasado?.Al toque de “carnaval, carnaval”, los vecinos llegaban a la residencia de ancianos Sagrada Familia para detenerse a compartir con nuestros mayores un poco del espectacular recreo carnavalesco. Posteriormente, bajaron la calle Rogelio Fernández y subieron por Generales Carvajal para asistir a la presentación de disfraces infantiles en el Salón Polivalente. Mientras los espectadores tomaban asiento, la charanga “El bombazo” subió al escenario para terminar de ofrecer grandes dosis de alegría carnavalesca.
En el desfile de disfraces, los más pequeños de Villanueva del Duque –tanto en la categoría individual, como en la grupal— ofrecieron todo un abanico de originalidad. Teléfonos antiguos enfrentados a los de nueva generación, con sus respectivos botones y roscas, mesitas de noche con luz propia, o una máquina para recoger el peluche más deseado, han merecido los tres premios que se han otorgado en la categoría individual.
Al hablar de grupos infantiles, “la visita de los moteros del infierno” a nuestro municipio, los innovadores emoticono, los superhéroes y esas pizzas que pedimos por teléfono, se llevaron los tres premios que este año el Ayuntamiento tenía reservados para la categoría infantil de grupo.
Una vez que se finalizó el desfile de disfraces infantiles, dos comparsas vecinas, con pasodobles y cuplés, y una chirigota emocionaron a un Salón Polivalente lleno hasta la bandera. La primera en actuar fue la comparsa “Los Tunantes” de Pozoblanco, cuya guitarra no dejó indiferente al público. Posteriormente, aunque se hizo de rogar, fue la comparsa “Los Ingeniosos” de Peñarroya, terminando con la chirigota “Con dos meses de retraso” de Añora.
De ahí, como cada año, los adultos ya empezaban a llegar al pabellón municipal para proceder al tradicional baile de disfraces. Color, alegría y muchas ganas, han sido las que este año han hilvanado el “Carnaval de los mayores”. Los picapiedras, paracaidistas con avión o las rehalas de sementales; han decidido quedar mudas frente a las ganas de volar de unos cuantos loros enjaulados. La medicina de varias enfermeras o un arca de Noé que ha decidido invocar en Villanueva del Duque aquel relato de la Biblia hebrea, en el que se narra cómo, por orden de Dios (Yahvé o Jehová), el patriarca Noé construye una embarcación para su salvación y la de su familia.
De este modo, en individual, el jurado ha decidido dar los cuatro premios disponibles al Arca de Noé, las Galletas de Jengibre, y a unas enfermeras muy dicharacheras –madre e hija—que en el baile pusieron todas sus ganas en la pista.