El óxido del cielo es el nuevo libro de Alejandro López Andrada que presentó el pasado miércoles Julio Llamazares en la Fundación Antonio Gala . La editorial El Páramo tuvo el honor de editar tan extraordinario libro. Aunque en este caso la alegría de presentar un bello texto llega por partida doble: una, la de que sea un escritor y poeta de la talla de Alejandro, y la otra, la de que sea una persona buena, en el buen sentido de la palabra como dijera el poeta. Conocí a Alejandro no hace mucho y desde el primer momento noté su cercanía, su humanismo y espiritualidad, y tuve la agradable sensación de que me reencontraba con un viejo amigo. Pero tengo con él y con esta magnífica obra mucho en común.
En primer lugar, poseer la doble nacionalidad, rural y urbana. Lo siento de corazón por aquellos que no tengan pueblo, aquellos lugares que se vieron despoblados en la década de los años 60 y 70 emigrando a los cinturones industriales de las grandes ciudades de este país. Mi familia entera emigró a Barcelona. Mis padres, como mis abuelos, vienen de ese mundo rural, de ese territorio que también conoce Alejandro. Un territorio de fatigas y hambre. Esa literatura íntima que se revela llena de sentido, de poesía, de valor antropológico y etnográfico, y cuyos paisajes dibuja el autor acercándonos a la ornitología y la naturaleza, los sentimientos y las personas que lo habitan. Son esas historias de las que formamos parte que se quedan flotando en las esquinas, hasta que llega el escritor y el poeta, sanadores del alma, y las recogen con sus palabras para regalárnoslas.
Manuel Mestre para Diario Córdoba
Guionista-realizador TV
Desde Barcelona quiero felicitar a mi buen vecino y amigo Alejandro, por la rapidez que está creciendo como escritor
¡¡Alejandro eres un monstruo¡¡
También quiero felicitar a todos los Culés del pueblo por el gran chorreo de buen juego que este Barça nos ha ofrecido esta temporada
Copa, Liga,Champions ¡¡¡¡DEMASIADO¡¡¡¡
VISCA EL BARÇA